Tu compra no es sostenible si no respeta los Derechos Humanos.
Lo “bio” está de moda. También lo “zero waste” y lo “plastic free”. Lo “vegan”, lo “local” y lo “slow” cada vez son más “trendy” (y parece que en inglés todavía es más “cool” optar por estas alternativas).

Lo sostenible vende.
Y eso, en principio, es una buena noticia: cada vez más personas buscamos reducir residuos, evitar plásticos innecesarios y apostar por alternativas ecológicas.
El debate sobre el impacto que tienen nuestras elecciones de consumo en el planeta está servido: deforestación, contaminación, destrucción de hábitats, emergencia climática…. Nuestro planeta no da para más, y los daños colaterales de nuestra forma de consumir son más que patentes.
Cuando la sostenibilidad se queda a medias.
El interés por apostar por la “sostenibilidad” es creciente y esta realidad no se le escapa a las grandes multinacionales de la alimentación y de la moda. Buscando la maximización de sus beneficios, se suman al “carrito de la compra sostenible” con potentes campañas de “greenwashing” y con el lanzamiento de productos aparentemente llenos de bondades para el planeta, pero que esconden realidades cuestionables.
Algunos ejemplos...:
-moda "ecológica" y "consciente"… pero elaborada de forma masiva en la otra punta del mundo, sin respeto ninguno a los derechos laborales de las personas trabajadoras, por marcas que generan beneficios multimillonarios fabricando moda convencional (en el artículo "el greenwashing de la moda en tres ejemplos" de Carro de Combate encontrarás más información interesante)
- cosmética sólida… como si por el simple hecho de ir embalada sin plásticos no contaminara el agua con muchos de sus componentes químicos, o fuera mejor para el cuidado de nuestra piel,
- alimentación BIO… que aunque cumpla con todos los estándares oficiales para tener certificación ecológica representa tan solo una ínfima parte del volumen de producción de la marca, y además se produce en condiciones de trabajo cuestionables…
¿De verdad podemos llamar a todo esto sostenible?
Aquí es donde organizaciones que llevamos mucho tiempo impulsando el Comercio Justo y la Economía Solidaria hacemos sonar nuestras alarmas.
¿Es sostenible todo lo que reluce?
En SETEM lo tenemos claro. La “sostenibilidad” es un concepto que puede decir mucho pero también que puede vaciarse muy fácilmente de significado y esconder realidades insostenibles… e intolerables.
Para nosotras, si la sostenibilidad ambiental (producción ecológica, respeto al medio ambiente…) no va de la mano de la sostenibilidad social y económica (respeto a los derechos laborales de las personas trabajadoras, salarios dignos, creación de oportunidades, empoderamiento…), no es sostenible en absoluto.
Respeto y cuidado de la naturaleza y sus procesos y respeto a los derechos humanos tienen que ir de la mano, y esta premisa está en el corazón y raíz del movimiento del Comercio Justo y de la Economía Social y Solidaria.
Por eso queremos animarte a dar el paso hacia un consumo más consciente, crítico y sostenible, y a apostar por opciones más comprometidas de manera real y profunda con el cuidado del planeta y de las personas.
¿Algunas ideas sostenibles y coherentes? ¡Allá vamos!
- Frente a cafés ecológicos de marcas multinacionales que controlan el mercado global y presionan con plazos y precios a la baja a las cooperativas cafetaleras…. CAFÉ ECOLÓGICO DE COMERCIO JUSTO
- Frente a chocolates BIO y gourmet de empresas que son líderes en deforestación y que no garantizan ausencia de trabajo infantil en sus cadenas de suministro… CHOCOLATE ECOLÓGICO DE COMERCIO JUSTO
- Frente a prendas de moda ecológica fabricadas por grandes gigantes textiles sin garantías de respeto a los derechos laborales...MODA SOSTENIBLE y DE COMERCIO JUSTO
Y no solo en productos de consumo diario: en el Mercado Social de Madrid encontrarás proveedores de energía, finanzas, cultura, movilidad… ejemplos de cómo es posible apostar por una economía más justa y sostenible en todos los ámbitos de tu vida.
Y ahora te toca a ti
¿Realmente es sostenible un producto que cuida el planeta pero explota a las personas?
Te animamos a reflexionar sobre tu consumo y dar el paso hacia alternativas más conscientes y comprometidas.
👉 Cuéntanos en los comentarios qué productos de Comercio Justo o de la Economía Social y Solidaria ya forman parte de tu día a día.
👉 Y si quieres dar un paso más, comparte este artículo para que mucha más gente de el paso hacia un consumo más crítico, consciente y sostenible.